Nueve de la mañana, los chicos y chicas de segundo de Bachiller llegábamos al colegio con nuestras mochilas y sacos dispuestos a pasar dos días geniales.
Tras comprobar que estábamos todos, nos dirigimos al tren primero hasta Abando y desde ahí a Orduña. Una vez allí, nos repartimos en las habitaciones y nos dejaron tiempo para comer y dar un paseo por el pueblo. A continuación nos reunimos todos en una sala donde nos echamos unas risas viendo nuestras fotos de pequeños, las de los profesores incluidos; después de la risa llegaba el momento de separarnos en grupos y reflexionar un rato.
En la primera parte, dibujamos nuestra carretera, en representación de nuestra vida y con nuestras subidas y bajadas; fue un momento emotivo. Tras esto tuvimos un pequeño descanso y al rato seguimos con los grupos. En esta segunda parte, hablamos sobre las personas que siempre están dispuestos a ayudarnos y que están ahí, como la familia y amigos. También hablamos sobre nuestro futuro y el miedo que teníamos ante él. Después de dar un paseo, fuimos a cenar y, al terminar, un poco de tiempo libre por las habitaciones y dispuestos ya a recuperar fuerzas para el día siguiente.
Viernes, ocho de la mañana, veíamos que las convivencias estaban llegando a su fin. Una ducha rápida, desayuno y tenían una visita sorpresa para nosotros. Una chica muy maja nos dio una técnica de relajación, que practicamos. Fue un momento donde el cuerpo quedaba totalmente relajado y descansado. Más tarde, nos reunimos todos y comentamos un cuento que nos habían regalado el día anterio. Por la parte de atrás de esa hoja pusimos nuestro nombre y lo dejamos en una mesa. Despúes, cada uno cogía la hoja de la persona que quería y le ponía algo que no le había dicho antes o le recordaba algo que ya sabia. Tras esto cogimos las mochilas y sacos y nos dirigimos al tren. Nos costó llegar hasta Barakaldo tras algún problemilla, pero finalmente estábamos aquí a las tres .
Han sido dos días llenos de emociones de risas, lloros, abrazos, y pensar que han sido las últimas…
Texto: Andrea Angulo y Maitane Díaz.
.
«Y te das cuenta de todo» Pablo Lopez-en hausnarketa
Y te das cuenta de todo. Cuando estás sentado en el suelo rodeado de la gente que te acompaña día tras día, cantando mientras el compañero de la silla rasga las cuerdas haciendo que nuestras voces se alcen como si fuera una sola. Y te das cuenta de todo. Que siempre han estado ahí, dispuestos a hacer la rutina más extraordinaria, divirtiéndote con chistes malos y preocupándose cuando estás mal.
Jarraitu irakurtzen bere blogean
.
[flickr]set:72157636795812564[/flickr]